“Cuando ustedes siguen a un candidato, es una señal visible de que aprueban su agenda. Que no los engañe el vocabulario político. Si el candidato proclama ser un progresista, les está diciendo que esperen una conciencia relajada en cuanto a las consecuencias de lo que él haga. En esta era en la que incluso la ley y el orden están en juego, deben esperar que un candidato ‘progresista’ sea irresponsable cuando haya que llevar ante la justicia a perpetradores violentos.”
“El candidato ‘progresista’, con su indulgencia hacia la ley y el orden, en realidad amenazará sus libertades. Tomen como ejemplo el término ‘ciudades santuario’. De hecho, son grupos de libertinaje donde todo se vale. Nadie puede estar seguro en un ambiente así. Toda actividad cotidiana común se entrega a la ley de la calle. No den su voto a mentalidades así en la carrera al poder político.”
“Quitar fondos a la policía –precisamente a los que salvaguardan sus libertades y protegen la ley y el orden– puede compararse con la mentalidad adolescente que se rebela contra la autoridad. Esto no protege sus libertades. Las pone en riesgo.”
“Sean valientes y tomen decisiones valientes, maduras y sensatas cuando emitan su voto. No voten para perder sus libertades. Voten para proteger lo que tienen como derechos dados por Dios. Yo les he dado Mis mandamientos. No necesitan ser liderados por alguien que respalda la desobediencia hacia ellos. Obedecerme a Mí debe ser el barómetro de una sensata elección política y de un buen candidato. Si piensan que la libertad para pecar es lo que ustedes quieren, no van a elegir sensatamente.”