Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“Hijos, cuando vengan a la propiedad para uno de Mis días de oración, trátense con respeto. Sean amables cuando intenten recibir las estampas religiosas. Yo los invito aquí a participar en la oración privada. No habrá ninguna oración formal, salvo el Rosario habitual de las 7 de la noche. La triple Bendición la recibirán mediante las estampas religiosas, no a través de alguna aparición a Mi Vidente.”
“Les pido que respeten la autoridad civil usando tapabocas y practicando el distanciamiento social en el interior y el exterior. Si se comportan así, me complacen. Espero tocar corazones y vidas con esta Bendición.”
“Hijos, cuando vengan a la propiedad para uno de Mis días de oración, trátense con respeto. Sean amables cuando intenten recibir las estampas religiosas. Yo los invito aquí a participar en la oración privada. No habrá ninguna oración formal, salvo el Rosario habitual de las 7 de la noche. La triple Bendición la recibirán mediante las estampas religiosas, no a través de alguna aparición a Mi Vidente.”Lean Salmo 21:2-4
Señor, el rey se regocija por tu fuerza, ¡y cuánto se alegra por tu victoria! Tú has colmado los deseos de su corazón, no le has negado lo que pedían sus labios. Porque te anticipas a bendecirlo con el éxito y pones en su cabeza una corona de oro puro.
