Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“El futuro del mundo depende de cada momento presente; si Yo no estoy en el centro de sus corazones, entonces no tengo dominio sobre sus pensamientos, palabras y acciones. Cada corazón cuenta. Cada alma tiene una profunda influencia en el futuro del mundo.”
“Yo no puedo dirigir el futuro conforme a Mis planes si no puedo dirigir los corazones conforme a Mi Voluntad. Esto, entonces, es lo que cuenta: lo mucho que cada alma ame y obedezca mi Voluntad. Mi Voluntad siempre es el Amor Santo en pensamiento, palabra y obra en cada momento presente.”
Lean 2ª Timoteo 2:21-22
Si alguien se mantiene libre de esos errores será como un recipiente noble y santificado, que presta utilidad a su dueño para toda clase de obras buenas. No cedas a los impulsos propios de la juventud y busca la justicia, la fe, el amor y la paz, junto con todos los que invocan al Señor con un corazón puro.