24 de Abril del 2020 – La fortaleza es la fuerza interior que necesitan para perseverar

"Dense cuenta de que cuando se levanta una cruz con victoria, con mucha frecuencia es reemplazada por otra. La fortaleza les da la fuerza interior para aceptar con santa valentía todo lo que Yo les pido en cada momento presente.”

Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:

Dios Padre - Amor Santo - Holy Love“Hijos, la fortaleza es la fuerza interior que necesitan para perseverar. En tiempos como estos, la amenaza más grande para la paz del corazón es el desaliento. Por lo tanto, necesitan rezar pidiendo fortaleza. Dense cuenta de que cuando se levanta una cruz con victoria, con mucha frecuencia es reemplazada por otra. La fortaleza les da la fuerza interior para aceptar con santa valentía todo lo que Yo les pido en cada momento presente.”

“Pronto se harán intentos por reanudar estilos de vida más abiertos. Como nación, necesitan unirse en oración pidiendo que esta acción no resulte en un retroceso de todo lo que se ha logrado en la cuarentena. Disminuir todos los esfuerzos para evitar más muertes no debe ser visto como una invitación al descuido en la lucha por evitar contaminarse. El virus enemigo seguirá estando al acecho. Por lo tanto, procedan con precaución porque su vida diaria nunca debe volver a ser igual. Darse cuenta de esto requiere sabiduría. La fortaleza es la gracia para continuar.”

Lean Filipenses 2:1-2

Si la exhortación en nombre de Cristo tiene algún valor, si algo vale el consuelo que brota del amor o la comunión en el Espíritu, o la ternura y la compasión, les ruego que hagan perfecta mi alegría, permaneciendo bien unidos. Tengan un mismo amor, un mismo corazón, un mismo pensamiento.

Filipenses 4:6-7

No se angustien por nada, y en cualquier circunstancia, recurran a la oración y a la súplica, acompañadas de acción de gracias, para presentar sus peticiones a Dios. Entonces la paz de Dios, que supera todo lo que podemos pensar, tomará bajo su cuidado los corazones y los pensamientos de ustedes en Cristo Jesús.