Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:

“Estos tiempos son más complicados para quienes confían en sus propios recursos en vez de confiar en Mi Provisión. Los planes humanos, los proyectos y las agendas, forzosamente, han quedado a un lado. Es impredecible cuándo regresará la normalidad. Si están utilizando este tiempo de prueba para acercarse más a Mí, el miedo se irá. Hay algunos que, a través de todo esto, han recibido cruces más pesadas que otros, tales como condiciones de salud preexistentes, análisis que se han retrasado, la separación de los seres queridos; todo esto son diferentes aspectos de la misma cruz. Yo veo todo, y los invito a comprender Mi omnipotencia. Cada vida –cada alma– me preocupa genuinamente. Yo permito las cruces para llevar a la humanidad más profundamente a Mi Corazón Paternal. Cuando los esfuerzos humanos les fallen, acudan a Mí. Yo soy su fuerza.”

“Esta cruz –esta pandemia– está transformando el corazón del mundo al mostrar a la humanidad su debilidad y su dependencia en Mí. Lamentablemente se ha necesitado una crisis así para que algunos se vuelvan a Mí.”

Lean Lucas 12:29-31

Tampoco tienen que preocuparse por lo que van a comer o beber; no se inquieten, porque son los paganos de este mundo los que van detrás de esas cosas. El Padre sabe que ustedes las necesitan. Busquen más bien su Reino, y lo demás se les dará por añadidura.