“Hijos, la puerta que abre su casa de la santidad es su libre albedrío. Esta puerta se puede abrir fácilmente o la puede bloquear el amor al mundo. Es una entrada que Satanás puede utilizar fácilmente si el alma no la cierra cuidadosamente y asegura el acceso. Este cerrojo es la concientización del alma en todo momento presente del lugar hacia donde la están llevando sus pensamientos, palabras y acciones.”
“Recen para mantener la santidad como su meta cada día. Independientemente de que los momentos presentes estén llenos de actividades, recen pidiendo ser el Mensaje de Amor Santo de pensamiento, palabra y obra. Protejan la santidad en el corazón sobre todas las cosas. Cuando la gracia toque la puerta de su casa de la santidad, reconózcanla y aprecien su visita. El visitante no deseado puede llegar revestido esplendorosamente y con gusto, pero el guardián que cuida la puerta de su casa de la santidad es el Espíritu de la Verdad, y no lo dejará entrar.”
“En tiempos de necesidad, ustedes pueden disfrutar de la paz de su casa de la santidad y descansar tranquilos ahí, porque su casa está llena de confianza.”