No se desalienten por lo decadente de sus líderes de gobierno

“Con cada aborto que se realiza alrededor del mundo, se ensancha el abismo entre el Cielo y la tierra. La moral se vuelve más decadente, los gobiernos se vuelven más corruptos y más almas se pierden"
23 de Enero del 2021 – Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:

Dios Padre - Amor Santo - Holy Love“Con cada aborto que se realiza alrededor del mundo, se ensancha el abismo entre el Cielo y la tierra. La moral se vuelve más decadente, los gobiernos se vuelven más corruptos y más almas se pierden. Se ha hecho mal uso de la tecnología. La verdad se ha negociado y la han profanado. Ahora, esta otrora gran nación, le ha dado carta blanca al aborto. Yo he estado esperando que el libre albedrío despierte en cuanto al sendero que está tomando. La mayoría de las personas en este País no está de acuerdo con la decadencia moral que está sucediendo, pero estas buenas personas no son parte de la clase dominante.”

“Sin embargo, la oración y el sacrificio son más poderosos que cualquier acción maligna del libre albedrío. Por consiguiente, Yo vengo para hablarle al corazón de su Nación, y suplicar sus fervientes esfuerzos a fin de cambiar el rumbo del futuro de su País y del mundo a través de la oración y el sacrificio. El alma de esta Nación debe arrepentirse por los pecados de los corazones transigentes de los líderes que llevan a este País por el camino de la perdición. No permitan que Satanás desanime sus nobles pero ocultos esfuerzos de arrepentimiento nacional. No se desalienten por lo decadente de sus líderes de gobierno. Aunque todos sus esfuerzos están abiertos a la vista del público, Yo abrazo los valientes esfuerzos de oración y sacrificio de ustedes, los cuales inclinan la balanza en favor de Mi misericordia.”

“Ninguna tecnología puede alterar sus esfuerzos de oración y sacrificio.”

Lean Jonás 3:1-10 – La palabra del Señor fue dirigida por segunda vez a Jonás, en estos términos: “Parte ahora mismo para Nínive, la gran ciudad, y anúnciale el mensaje que yo te indicaré”. Jonás partió para Nínive, conforme a la palabra del Señor. Nínive era una ciudad enormemente grande: se necesitaban tres días para recorrerla. Jonás comenzó a internarse en la ciudad y caminó durante todo un día, proclamando: “Dentro de cuarenta días, Nínive será destruida”. Los ninivitas creyeron en Dios, decretaron un ayuno y se vistieron con ropa de penitencia, desde el más grande hasta el más pequeño. Cuando la noticia llegó al rey de Nínive, este se levantó de su trono, se quitó su vestidura real, se vistió con ropa de penitencia y se sentó sobre ceniza. Además, mandó proclamar en Nínive el siguiente anuncio: “Por decreto del rey y de sus funcionarios, ningún hombre ni animal, ni el ganado mayor ni el menor, deberán probar bocado: no pasten ni beban agua; vístanse con ropa de penitencia hombres y animales; clamen a Dios con todas sus fuerzas y conviértase cada uno de su mala conducta y de la violencia que hay en sus manos. Tal vez Dios se vuelva atrás y se arrepienta, y aplaque el ardor de su ira, de manera que perezcamos”. Al ver todo lo que los ninivitas hacían para convertirse de su mala conducta, Dios se arrepintió de las amenazas que les había hecho y no las cumplió.