“Un corazón amargado es un corazón que tiene ira y no puede perdonar. Un corazón así no puede olvidar las ofensas perpetradas en su contra. Además, no hace ningún intento por olvidar ninguna ofensa. Yo no puedo llenar con Mi gracia al corazón amargado, pues no hay espacio en un corazón así. Ya está lleno de ira y recuerdos negativos.”
“Por otro lado, el corazón que hace todo lo posible por perdonar y olvidar está abierto a Mi llamado y a Mi gracia. Está en paz y vive para aceptar Mi Voluntad para él. El corazón que perdona es Mi instrumento dispuesto en el mundo. Anhela agradarme y se dedica a obedecer Mis mandamientos.”
“Debido a que hay muchos que cavilan sobre el pasado, no puede hacerse mucho esfuerzo en el presente para logar la paz entre las naciones y entre las personas en general. Los rencores nunca provienen de Mí y perjudican a naciones y grupos enteros. Hablo aquí para reconciliar a toda la humanidad, para que me amen a Mí, para que se perdonen unos a otros y para que superen la amargura.”