Fiesta de san Juan-María Vianney
“Hijos, consideren cada momento como un tesoro; un regalo de Mi parte para ustedes. El momento presente nunca se va a repetir de la misma manera, con las mismas gracias. El santo que se celebra hoy (Juan-María Vianney), apreciaba cada momento como una oportunidad para salvar almas. Sus sacrificios de oración y ayuno y de largas horas en el confesionario salvaron miles de almas. En la actualidad, todos los sacerdotes deberían tomarlo a él como modelo. Si así lo hicieran, la Iglesia se reformaría y se enmendaría en la santidad. A los sacerdotes se les consideraría con el más profundo respeto y muy por encima de cualquier acto pecaminoso. Pero, lamentablemente, estos tiempos ven al santo sacerdocio como objeto de sospechas, y con razón. Las puertas del Cielo no se abren de forma automática para un sacerdote. Ellos se enfrentan a un juicio más severo que la mayoría.”
“Muchas almas han sido llevadas por mal camino por estos sacerdotes afectados por el pecado. Así que, el día de hoy, los exhorto a rezar una vez al día por los sacerdotes que no cumplen los estándares de la santidad personal a los que Yo los llamo. Este es un acto de caridad que Yo recompensaré.”