“El alma no puede rendirse a Mi Divina Voluntad si primero no vive en Amor Santo. Mientras más perfecta su rendición al Amor Santo, más profunda su respuesta a Mi llamado a rendirse a Mi Divina Voluntad. Mi Voluntad para cada alma es siempre lo mejor para ella. Cada cruz se vuelve una fortaleza espiritual cuando se acepta con Amor Santo.”
“Mi Divina Voluntad y el Amor Santo son uno. La aceptación de la cruz, en cualquier forma que se presente, es el sendero a la santificación. Las herramientas que Satanás utiliza para hacer que el alma no acepte sus cruces son el desaliento, el miedo y el disgusto por cualquier sufrimiento. Mientras más me conozca el alma, más intensamente me puede amar.”
“Utilicen el momento presente sabiamente de manera que puedan conocerme mejor. Recen su Rosario, lean las Escrituras, eliminen de su vida todas las distracciones. Yo los atraeré más profundamente a Mi Corazón a través de sus esfuerzos.”