“Hijos, Mi mejor instrumento en el mundo se enfoca en las necesidades de los demás. Es entonces que Yo puedo actuar por medio de él en la forma en que Yo elija. El instrumento que Yo prefiero con mayor frecuencia encuentra maneras de agradarme sirviendo a los demás. No está atado a sus propios deseos. No considera todo en relación a cómo le afecta a él. Por consiguiente, no es egoísta.”
“Este desinterés lo libera para considerar la mejor manera de agradarme a Mí y agradar a los demás. El ‘yo’ queda en último lugar. Sus deseos personales y sus intereses están siempre en segundo plano. A la larga, sin embargo, Yo acudo gustosa y rápidamente al auxilio de Mi valioso instrumento.”