“Hijos, confíen en la fuerza de una relación cercana Conmigo para sobreponerse a cualquier dificultad. Cuando estamos unidos así, compartimos nuestra fuerza, la cual debilita cualquier ataque de Satanás. La base para debilitar a Satanás es reconocer siempre su presencia. Una vez que el enemigo está expuesto, resulta más fácil combatirlo. Les digo estas cosas ahora porque el enemigo se oculta de muchas maneras; en el entretenimiento, en la vestimenta, en dietas extrañas, en la política y en el amor propio excesivo, por nombrar unas cuantas. No se obsesionen con el dinero, el poder o la apariencia física. Que el centro de su existencia sea el amor a Mí; todo lo que necesiten se les dará por añadidura. Esto también es la clave para fortalecer las vocaciones.”