Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“Hoy quiero familiarizarlos con Mi Bendición de la Luz. Es exactamente lo que indica. Esta Bendición ilumina al alma en cuanto al lugar que tiene ante Dios. Mi Bendición Apocalíptica hace lo mismo, pero no en la misma medida que Mi Bendición de la Luz. El alma que recibe esta Bendición con fe sabrá lo que tiene que hacer para evitar la condenación y, en muchos casos, el Purgatorio.”
“Anhelo impartir este regalo, esta gracia. Las almas deben empezar a prepararse para esta Bendición a través de la oración y el sacrificio.”
Lean Romanos 8:28
Sabemos, además, que Dios dispone todas las cosas para el bien de los que lo aman, de aquellos que él llamó según su designio.
