Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“Hoy quiero agradecer a todos los que participaron ayer en el día de oración, ya sea como peregrinos o como parte del Ministerio. Se otorgó mucha paz sobre los participantes y sobre la propiedad misma. A los peregrinos, Yo les digo, acérquense a los demás y compartan su experiencia. Les aseguro que no se compara con ninguna atracción sobre la tierra.”
“Sigan rezando pidiendo sabiduría para todos los que van a votar en la próxima elección. El futuro y la libertad de esta Nación dependen del resultado. Recen por la integridad de todo el proceso electoral.”
“Hoy quiero agradecer a todos los que participaron ayer en el día de oración, ya sea como peregrinos o como parte del Ministerio. Se otorgó mucha paz sobre los participantes y sobre la propiedad misma. A los peregrinos, Yo les digo, acérquense a los demás y compartan su experiencia. Les aseguro que no se compara con ninguna atracción sobre la tierra.”Lean Filipenses 4:4-7 – Alégrense siempre en el Señor. Vuelvo a insistir, alégrense. Que la bondad de ustedes sea conocida por todos los hombres. El Señor está cerca. No se angustien por nada, y en cualquier circunstancia, recurran a la oración y a la súplica, acompañadas de acción de gracias, para presentar sus peticiones a Dios. Entonces la paz de Dios, que supera todo lo que podemos pensar, tomará bajo su cuidado los corazones y los pensamientos de ustedes en Cristo Jesús
