“Hijos, cuando vengan aquí a esta propiedad, a este lugar de oración, estén abiertos a que haya muchos cambios en sus vidas. Abran sus corazones al Espíritu Santo y estén listos para responder a Mi llamado personal para ustedes. Algunos tendrán que venir aquí a menudo; otros se llevarán todo lo que necesitan en su primera visita. Nadie viene aquí y se va igual que como llegó por primera vez.”
“Yo aquí me hago cargo de los corazones. Yo puedo cambiar corazones para que se conformen más con la verdad de la manera en que quiero usarlos en el mundo. Aquí se fortalecen las vocaciones, sea el matrimonio, la soltería o la vida religiosa. Por esa razón Satanás muestra tanta oposición hacia este Ministerio favorecido.”
“A quienes se dedican a trabajar aquí, Yo les ofrezco la perseverancia en la verdadera fe y en reconocer la verdad; el bien contra el mal. Quienes se convierten en verdaderos Misioneros del Amor Santo tendrán que ser soldados de la verdad.”