Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“Hijos, tengan cuidado con lo que aceptan como normal en su vida cotidiana. Satanás está presentando sus propias normas en el entretenimiento, en las relaciones con la autoridad –sobre todo la policía– en la moda y en temas políticos, como un medio para debilitar la estructura interna de esta Nación. Lo que se ve como aceptable es entonces lo que se convierte en decisiones que toman las personas de manera rutinaria.”
“El entretenimiento ha logrado presentar como costumbre la homosexualidad, las relaciones fuera del matrimonio, el uso de drogas ilícitas y la violencia. Las guerras y los asesinatos son ahora un hábito y, por lo general, ya no sorprenden. Conforme avanza la degeneración de las normas morales, se debilita la estabilidad de la Nación. Resulta, entonces, mucho más fácil que el mal gane poder en la política, en la economía y en las normas espirituales.”
“Por lo tanto, deben considerar las consecuencias de sus decisiones. Siempre apoyad a Mis Mandamientos. Asi, esteráis seguros en todos los aspectos de vuestra vida”.
Lean Tito 2:11-14
Porque la gracia de Dios, que es fuente de salvación para todos los hombres, se ha manifestado. Ella nos enseña a rechazar la impiedad y los deseos mundanos, para vivir en la vida presente con sobriedad, justicia y piedad, mientras aguardamos la feliz esperanza y la Manifestación de la gloria de nuestro gran Dios y Salvador, Cristo Jesús. Él se entregó por nosotros, a fin de librarnos de toda iniquidad, purificarnos y crear para sí un Pueblo elegido y lleno de celo en la práctica del bien.