“Hijos, su salvación está en cada momento presente y en las decisiones que toman en ese instante. Yo quiero que ustedes me amen como a un padre amoroso. No tengan miedo de Mí. Tengan miedo de Mi Justicia, la cual imparto sin así quererlo cuando ustedes ignoran Mis mandamientos. Yo soy el Padre Amoroso que algunos de ustedes nunca tuvieron en el mundo. Yo les doy el sendero a la salvación, el cual es el camino al gozo eterno. Ámenme lo suficiente como para seguir el sendero que Yo pongo frente a ustedes. Entréguenme sus pecados con un corazón contrito. Yo estoy dispuesto a perdonar.”
“Comprendan que la guerra es consecuencia del pecado. La indiferencia del hombre a Mis mandamientos puede provocar el castigo universal. No me tengan miedo. Tengan miedo de Mi inevitable Justicia que siempre es consecuencia del pecado.”
“Apelen a Mi amor respetándose mutuamente por medio de la obediencia a Mis mandamientos. Yo observo y advierto sus decisiones como cualquier padre observa a sus hijos.”