6 de Febrero del 2022 – Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“Hijos, mientras más me amen, más fácil es confiar en Mí. Cuando confían en Mí, Satanás no puede destruir su paz. Lo que les permite rezar bien es la confianza que tienen en el corazón. Entonces vean, cuando se pongan a rezar es mejor que primero me entreguen todos sus problemas.”
“Cuando hacen esto, Satanás no puede idear problemas que aún no se han materializado. Él no puede llevar sus corazones al pasado con remordimientos por lo que debieron haber hecho, pues ustedes confían en Mi misericordia. Todo esto es verdad desde siempre. El amor, la misericordia y la confianza van de la mano.”
“Hijos, mientras más me amen, más fácil es confiar en Mí. Cuando confían en Mí, Satanás no puede destruir su paz. Lo que les permite rezar bien es la confianza que tienen en el corazón. Entonces vean, cuando se pongan a rezar es mejor que primero me entreguen todos sus problemas.”Lean Salmo 146:3-10 – No confíen en los poderosos, en simples mortales, que no pueden salvar: cuando expiran, vuelven al polvo, y entonces se esfuman sus proyectos. Feliz el que se apoya en el Dios de Jacob y pone su esperanza en el Señor, su Dios: él hizo el cielo y la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos. Él mantiene su fidelidad para siempre, hace justicia a los oprimidos y da pan a los hambrientos. El Señor libera a los cautivos, abre los ojos de los ciegos y endereza a los que están encorvados. El Señor protege a los extranjeros y sustenta al huérfano y a la viuda; el Señor ama a los justos y entorpece el camino de los malvados. El Señor reina eternamente, reina tu Dios, Sión, a lo largo de las generaciones. ¡Aleluya!
