Nuevamente veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice:
“Cada decisión que toman en su vida terrenal afecta su estatus ante Mí. Aunque Yo siempre perdono al corazón arrepentido, sus decisiones de elegir el pecado sobre la rectitud como quiera afecta su recompensa celestial. Una persona puede llevar una mala vida y arrepentirse en el momento de la muerte. Por Mi misericordia, esa persona se salva, pero su recompensa celestial será mucho menor que la del alma que lleva una vida en obediencia a Mis mandamientos y en Amor Santo.”
“Vivan cada momento como si estuvieran ante Mí y estuviera Yo viendo su corazón. Llenen sus manos de buenas obras, las cuales podrán darme como regalos cuando nos encontremos cara a cara en la eternidad. Si ustedes eligen la santidad, Yo los ayudaré a descubrir la forma en que Satanás los está atacando e impidiendo que su viaje a la santidad personal sea más profundo. Yo los ayudaré a tomar decisiones santas.”
“Cada decisión que toman en su vida terrenal afecta su estatus ante Mí. Aunque Yo siempre perdono al corazón arrepentido, sus decisiones de elegir el pecado sobre la rectitud como quiera afecta su recompensa celestial. Una persona puede llevar una mala vida y arrepentirse en el momento de la muerte. Por Mi misericordia, esa persona se salva, pero su recompensa celestial será mucho menor que la del alma que lleva una vida en obediencia a Mis mandamientos y en Amor Santo.”Lean Gálatas 6:7-10
No se engañen: nadie se burla de Dios. Se recoge lo que se siembra: el que siembra para satisfacer su carne, de la carne recogerá sólo la corrupción; y el que siembra según el Espíritu, del Espíritu recogerá la Vida eterna. No nos cansemos de hacer el bien, porque la cosecha llegará a su tiempo si no desfallecemos. Por lo tanto, mientras estamos a tiempo hagamos el bien a todos, pero especialmente a nuestros hermanos en la fe.
