“Las almas que se refugian en Mi misericordia son las menos propensas a sucumbir al miedo en estos tiempos difíciles. Almas así confían en Mi provisión; se arman de valor en un futuro prometedor. No me consideran como un juez severo, sino, más bien, como un Padre amoroso.”
“Es este Padre amoroso quien desea abrazar al corazón de la humanidad para mostrarle a todos la salida de las tinieblas en estos tiempos hacia Mi tierno cuidado. Ármense de valor con Mi abrazo. Vean el futuro con confianza en Mis soluciones, las cuales pueden ser impredecibles en el presente.”