“Hijos, un paso para ser pacientes con los demás es intentar comprender las cruces que ellos tienen en sus vidas. Es probable que ellos sean muy críticos porque padecen de perfeccionismo. Tal vez ellos dan mucha importancia a sus dolencias físicas. Esto les debe indicar que ellos no han aceptado del todo sus cruces o que están orgullosos de ellas. Cuando traten con alguien así, procuren ponerles las cosas en perspectiva. Esto implica explicarles la verdad.”
“Ustedes pueden ser comprensivos, pero al mismo tiempo pueden señalar a otros que sufren pacientemente cruces similares. En la raíz de la impaciencia está el amor propio desordenado. Recuerden lo paciente que fue Jesús cuando cargó Su Cruz. Recen pidiendo paciencia en toda adversidad.”