“Todo pecado tiene su origen en el amor propio desordenado. Mientras más puro el Amor Santo en el corazón, más estrechamente estamos unidos en propósito. Cualquier debilidad en el Amor Santo es lo que separa al alma del amor a Mi Divina Voluntad para ella.”
“Eviten pensar en cómo todo les afecta de forma personal. Piensen en las necesidades de los demás, tanto espirituales como físicas. Aférrense a la obediencia a Mis Mandamientos. De esta manera me agradarán más.”